Parece ser que los conductores aparcan donde les sale de las narices, impidiendo la visibilidad, provocando accidentes, obstaculizando el paso a la gente con carritos de bebés y sillas de ruedas… en este reportaje fotográfico se puede apreciar de todo.
Hace tiempo alguien dejó un comentario sobre las cacas de perro en el carrer Olivera, pues ya tenemos a los culpables… vamos a por el primero.
Este señor, va paseando sin mirar lo que hace su perro y sin recoger los «recuerdos» que deja en la acera.
Barcelona está plagada de cacas de perro.
Vaya por donde vaya las hay por todas partes, y eso que la mayoría de personas con perro recogen los excrementos de sus perros, pero por culpa de una minoría que día tras día no las recogen, al final la calle da asco.
Además de las personas que podemos chafarlas y los problemas de higiene que comporta, quién más lo notan son las personas con carritos de bebés, con maletas y sobretodo las que van en sillas de ruedas, que se les pringa las ruedas y las manos de excrementos y meadas.
¡Pero se acabo! Voy a por vosotros cagones… ¡en los próximos días publicaré vuestras fotos!
A continuación muestro ejemplos del problema, en aceras, en cespeds, al lado de columpios de niños…
Paseando por el carrer Tapioles, nos encontramos con este panorama:
Con lo que costó erradicar en este país que la gente dejara de escupir por el problema sanitario que comporta, por no hablar de las asquerosas escupideras que habían en las entradas de edificios y locales… y volvemos de nuevo atrás, la gente escupe por todos lados.
