Voy a dejar constancia de la cantidad de helicópteros que pasan por los cielos de Barcelona, muchas veces a baja altura molestando con su ruido a los vecinos, despertando a los bebés y jodiendo a los que necesitamos concentrarnos para hacer nuestro trabajo.
En este caso, un helicóptero que no para en todo el rato, el día 23 de mayo 2010.