En Barcelona cada día hay más ruido, esto es inaguantable. Motos trucadas, publicidad sonora (y visual) en el Metro, bip bips por todos lados, y no hablemos cuando llegan «las obras del año antes de elecciones».
Alguien ha puesto este cartel por la calle, que sería un buen logo para montar una campaña anti-ruido:
Vean ustedes mismos, imaginemos que soy un turista que visito la ciudad de Barcelona, voy hacia la plaza Real y antes de entrar en la plaza, me encuentro esto tan… ¿bonito?
(miren en la tercera imagen, en que estado más lamentable se encuentre la entrada a la plaza Real)
¿A que espera el ayuntamiento? ¿a que se caiga a trozos? ¿o quizás es que les gusta que Barcelona demos una imagen de que pasamos de todo hasta el punto que dejamos como nuestro patrimonio se caiga a pedazos?
En Barcelona últimamente hay unos cenutrios que se dedican a robar ruedas y sillines a las bicicletas. De momento, no he oído que hayan detenido a nadie, pero actualmente en todos los barrios están robando y destrozando bicicletas y desde el Ayuntament de Barcelona NADIE MUEVE NI UN DEDO! 🙁
Y después dirán que «viscabarcelona!»… que vergüenza….
Bicicleta caída en combate, en la calle l’Om:
Me parece muy mal que la gente escupa por las aceras, pero que se meen, vomiten y otras cosas, ya es demasiado.
Aunque el ayuntamiento, ya podría mirar de poner más «waters» públicos. Y no hablo de Waters pagando, que mucho diseño pero cuando se tienen ganas de hacer necesidades y no se tiene una moneda encima ¿que se hace? a sí, ya recuerdo, según el ayuntamiento, entrar en un bar (que en la mayoría pone que sólo pueden utilizarlo clientes).
ViscaBarcelona! (broooough, no me estraña que la gente vomite)
Vamos a ver un ejemplo de obra realizada por un «auténtico profesional».
Alrededor del Carrer de Salvà, podemos encontrar la siguiente chapuza:
